San Marcos

Un bochornoso clásico se disputó en Iquique

Este partido no tuvo árbitros oficiales y finalizó con golpes entre los jugadores.

Este domingo se disputó un nuevo partido de exhibición entre Iquique y San Marcos en la región de Tarapacá. Anteriormente,  durante la semana se había jugado en Arica a puertas cerradas, en donde los ariqueños se quedaron con el triunfo por 2 a 0.

El bochorno organizacional comenzó antes del inicio del partido, ya que el club local se dio cuenta de que los árbitros no llegaban, siendo que son casi los primeros en arribar a los estadios, incluso antes que los planteles.

Deportes Iquique dijo que el miércoles pasado había informado a la ANFP el día y horario de este partido sin puntos y que ellos debían asignar los referis para este duelo. Lamentablemente los organizadores se dieron cuenta tarde que los árbitros no llegarían y tuvieron que llamar de emergencia a otros referis del fútbol amateur y por tanto el partido comenzó con 20 minutos de retraso.

En el inicio del partido las acciones estuvieron parejas hasta que los locales pudieron abrir la cuenta mediante lanzamiento penal en el minuto 28 con anotación de Hans Salinas.

En el primer minuto de agregado del primer tiempo, Cristian Duma aumentó para los locales y de esa forma se fueron a camarines.

Luego en la segunda etapa, Duma volvió a anotar en el minuto 53. Edson Puch puso el cuarto gol local 5 minutos más tarde, luego de una vistosa jugada colectiva.

Christian Pavez y Matias Leiva llegaron con los goles de los descuentos desde el banco ariqueño, en el minuto 75 y 77 respectivamente.

Cuando quedaban 5 minutos de juego reglamentarios, se produjo un encontrón entre los jugadores rivales, lo que incluso llegó a los golpes, lo que calentó de sobremanera el ambiente en el estadio, una situación que podría haber hecho que el partido finalice anticipadamente, pero la poca personalidad del árbitro impidió eso, incluso no amonestó a ningún jugador, siendo que los golpes habían sido más que evidentes.

En lo futbolístico, se nota que los dirigidos de Hernán Peña llevan poco tiempo juntos, no hay fiato dentro de la cancha y en defensa no están solidos, marcando de lejos.

Esperamos que con el tiempo, el juego de San Marcos mejore y tenga mejores frutos dentro de la cancha.

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